Pep Guardiola estuvo a punto de recalar la temporada pasada en el Chelsea, o eso por lo menos anuncia el diario Sport en el día de hoy. El técnico tenía un acuerdo cerrado con el equipo inglés pero la derrota ante ellos en las semifinales de la Champions le hizo cambiar de opinión y decidió tomarse un año sabático en Londres.
Abramovich quería a la dupla Guardiola - Vilanova para reflotar a un Chelsea que se estaba viniendo a menos en los últimos años, pero que finalmente se terminó proclamando campeón de Europa al final de esa temporada con Roberto di Matteo en el banquillo.
El técnico de Santpedor ya tenía decidido hace algún tiempo que iba a abandonar el Barça, pero no tenía nada claro si sentarse en un banquillo al año siguiente o descansar una temporada como finalmente hizo
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