Las negociaciones del Chelsea para hacerse con los servicios de Radamel Falcao han saltado por los aires después de que el Mónaco haya aparecido con un fajo de billetes, y sin asustarse por los 60 millones de euros de la cláusula de rescisión que figuran en el contrato de la estrella del Atlético de Madrid.
El delantero colombiano podría finiquitar su traspaso a Mónaco desde hoy mismo, en un acuerdo por valor de 10 millones anuales después de impuestos ya que el propietario del club, el ruso Dmitry Rybolovlev, busca construir un equipo para ganar el campeonato de Ligue 1 la temporada que viene. Recién ascendidos, no quieren esperar los tiempos habituales y van a ir a por todas en su vuelta a la élite.
El Chelsea había confiado en completar el fichaje estrella de Falcao, de 27 años de edad, tras ser identificado según indican los rumores, por el presunto director entrante José Mourinho como su máxima prioridad para el mercado de verano. El propietario de los Blues, Roman Abramovich, se preparó también para cumplir con la cláusula de rescisión del contrato de Falcao, pero el agente del jugador, Jorge Mendes, habría llegado a un acuerdo para que su cliente fuera al Stade Louis II.
Se ha sugerido que la prioridad de Falcao estaría sin embargo no muy lejos de su actual residencia. Incluso se insinúa que está desesperado por jugar en el Real Madrid, así que se especula con una cláusula de “fuga” en su contrato con el Mónaco para permitir que se vaya, ya sea en enero o el próximo verano. Si duda una jugada rocambolesca pero que no debería extrañar ya en el mundo del fútbol.
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