El entrenador del Chelsea, José Mourinho, cree que el impacto de los propietarios ricos en el fútbol ha mejorado el juego, no lo ha dañado. Roman Abramovich compró el club 'Blue' en junio de 2003, y durante las siguientes temporadas el Chelsea ganó el título de la Liga Premier por primera vez en su historia, dos años después.
El Manchester City tiene una historia similar con el jeque Mansour, y Mourinho se prepara para el encuentro ante el club rico en petróleo el domingo, e insiste en que la presencia de estas figuras del fútbol es clave para el crecimiento del deporte.
"El fútbol necesita tiburones", dijo Mourinho a periodistas. "El fútbol necesita de la inversión, se necesitan personas que les encanta el juego y quiere hacer de los clubes más pequeños clubes más grandes", dijo añadiendo: "Somos un tiburón listo. El tiburón que sabe cuándo atacar y cómo atacar".
El gasto de Abramovich ha disminuido durante las últimas temporadas, con la introducción de las reglas de juego limpio financiero, aunque a Mourinho se le permitió gastar más de 60 millones de libras esterlinas durante el verano.
Y el ex técnico del Real Madrid ha dado su respaldo a las nuevas sanciones, insistiendo en que es "feliz" de que los clubes estén obligados a gastar dentro de sus posibilidades. "Acepto la manera que es. Estoy contento con la forma en que es", apuntó Mourinho.
"Vine al Chelsea a trabajar con una cierta filosofía y estoy más que contento con el apoyo que la Junta y el propietario tienen en mi equipo. Estoy más que feliz con eso. El Chelsea ha cambiado mucho, porque sabemos que el Juego Limpio Financiero se va a poner en práctica. Y, por supuesto, queremos a la UEFA para gobernar la situación y encontrar si alguien no está haciendo lo mismo", concluyó.
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