Chelsea Peña Blue Blood: Diego Simeone vs José Mourinho: Duelo de motivadores en el banquillo

El arte de entrenar a un equipo de fútbol comprende muchos factores técnicos, académicos y experimentales pero, como cualquier otro rol de liderazgo y trabajo en equipo, también requiere de ciertas cualidades innatas como la carisma, la motivación y una pizca de mano izquierda.

Quizás ni Diego Simeone ni José Mourinho sean los técnicos mejor preparados del panorama futbolístico actual -el primero por simple falta de experiencia en los banquillos y el segundo por no haber seguido el clásico proceso de jugar en el fútbol de élite antes de comenzar a dirigirlo- pero lo cierto es que nadie puede negar que, en estos momentos, son dos de los mejores entrenadores del mundo.

Bien distintos en el método de trabajo y, sobre todo, en su relación con el entorno, lo cierto es que ambos tienen algo en común que es demasiado importante como para obviarlo: el espíritu de competición. Desde esta óptica analizamos a los que son, con el permiso de Pep Guardiola, los entrenadores del momento que, además, se verán las caras en las semifinales de la Liga de Campeones.

CHOLO SIMEONE

Con una dilatada y existosa carrera como futbolista, Simeone era el claro ejemplo de defensa argentino de la década de los 90', siendo un jugador que, no falto de cualidades, destacaba más por su 'veteranía' e incluso agresividad en el terreno de juego, aunque estas eran dos cualidades que completaban y no obstaculizaban el desarrollo del resto de talentos del argentino.

Destacando sus participaciones con el Inter de Milán, la selección de Argentina y el Atlético de Madrid, donde pasó la mayor parte de su carrera, se puede decir que como jugador Simeone lo ganó todo menos la Champions y el Mundial, los dos torneos por excelencia para clubes y selecciones, respectivamente.

Nada más retirarse como jugador, Simeone arrancó su aventura en los banquillos en el año 2006, haciéndose cargo de un Estudiantes de La Plata que terminó ganando el torneo Apertura a base de un coraje que fue el sello del Cholo como jugador, y lo sigue siendo como técnico.

La Champions es el título de clubes que le falta al 'Cholo'. Mou ya la ganó dos veces

Dos años después ganó el torneo Clausura con River y, ya en 2012, volvería a ganar un título en España con el Atlético de Madrid, aunque en esta ocasión como entrenador en la Europa League y, posteriormente, la Supercopa de Europa de ese mismo año y la Copa del rey de 2013.

Lejos de abrumarse por el éxito después de tantas temporadas de desilusiones y manos vacías, Simeone parece haber dado con la tecla del Atlético de Madrid, que esta temporada ha elevado todavía más un techo que ya no existe al pelear por la Liga BBVA -donde van primeros- y la Liga de Campeones, torneo en el que han logrado llegar a semifinales tras pasar por encima del todopoderoso FC Barcelona, entre otros.

Quizás esto sea lo más difícil de lograr, sobre todo en un vestuario que no está acostumbrado al éxito desmedido que está viviendo el equipo madrileño en la actualidad, pero lo cierto es que el control psicológico en general y la motivación en particular son las especialidades del Cholo.

El Atlético de Madrid no ha llegado a donde está gracias a un fútbol brillante, sino a la claridad mental, la humildad, el oficio y, sobre todo, las ganas de ganar. El equipo rojiblanco ya es temido porque no juega

los partidos, simplemente los gana exprimiendo al límite todos y cada uno de sus recursos, comenzando por la maravillosa falta de vergüenza de un equipo que sólo mira al frente y no tiene nada que perder.

La inestimable ayuda del Mono Burgos en el banco tampoco puede pasarse por alto en un equipo al que el dúo argentino da, sin lugar a dudas, otro carácter en un campo de fútbol en el que los colchoneros, comenzando por su afición, atemorizan a sus rivales desde antes de que comience a rodar el balón.

JOSÉ MOURINHO

En el otro lado tenemos a un hombre que no vivió como jugador el fútbol de élite pero que, en cambio, es uno de los pocos ejemplos que demuestran que para

dirigir este deporte no es estrictamente necesario jugarlo y, de hecho, quizás es también la escasez de esa 'deformación' profesional la que lleva a Mou a emplear en algunas ocasiones métodos poco ortodoxos e incluso innovadores para alcanzar su objetivo: el éxito.

Si la competitividad es el sello de Simeone, Mourinho la lleva al límite superponiéndola prácticamente a todo. El portugués, sin lugar a dudas, es un claro ejemplo de que el fin justifica los medios y el fin, para Mou, es la victoria.

Al portugués no le importa autoimolarse ante la prensa, su afición o incluso sus propios jugadores si cree que con ello puede acabar ganando títulos.

Guerras abiertas contra federaciones, árbitros, jugadores, rivales, periodistas e incluso otros entrenadores han sido puestas en práctica por el actual entrenador del Chelsea, que tiene toda una película montada a su alrededor con la que, inteligentemente, desvía la presión de sus jugadores sobre su propia persona en lo que, en el Real Madrid, terminó llevándolo al desgaste incluso tras lograr buenos resultados.

Lo cierto es que, aunque criticable, el método de Mourinho funciona a la prefección, ya que se podría decir que el técnico luso lo ganó todo allá por donde pasó, y pasó por las mejores Liga de Europa tras entrenar al Porto, al Inter de Milán, al Real Madrid y al Chelsea. Además, Mou cuenta

con dos Ligas de Campeones y una Copa de la UEFA que completan un palmarés prácticamente insuperable.

Diego Simeone y José Mourinho son dos entrenadores muy distintos, pero con lugares comunes como la victoria, la competitividad y el trabajo

psicológico en el deporte que, ya sea a pie de cancha o planeada en una libreta, parece darles muy buenos resultados.

Para este enfrentamiento de Liga de Campeones, el Atlético de Madrid llega eufórico, pero Simeone ha preferido quedarse con el cómodo papel de novato, mientras que el Chelsea de Mourinho, que viene de lograr una gran remontada en cuartos de final, se resiste al elogio y prefiere mantener el rol de 'víctima' que lleva asumiendo durante toda la temporada. ¿A quién le funcionará la táctica?

CHOLO vs MOU